viernes, 28 de marzo de 2014

Poesía en la boca del pasado.

La palabra viva nunca muere,
la muerte nunca acaba.

¿Qué será de mí después de todo?
Recuerdos que huyen y
otros que fluyen.

Me escondo tras una selva de palabras
y escritura
y más palabras.

¿Qué será de mí después de todo?
Palabras que fueron dichas,
palabras que viven en la muerte.
Susurros.

Algo,
que solo quede algo.

Caligrafía para jugar con lo único que amo.
El mar y la luna participan.
Y mis sueños: la palabra.

Ser dueña de creaciones,
ser dueña de nada y, así:
revivir palabras que nunca murieron.

2012