Sitió la necesidad de desvanecerse entre sus pensamientos. Buscó el día exacto en el que empezó todo y lo encontró.
Un fallo técnico, una pieza mal puesta, un pestañeo de ojos en mal momento. Quien sabe. Tal vez alguien trapicheaba entre los archivos del futuro y necesitó hacerlo.
Ahí, todo empezó a cambiar, igual que el volantazo del coche. Pero, ¿Y el momento cumbre? Ese en el que tu vida tropieza y todo cae(por su propio peso).
También lo sabe, lo encuentra ahí tapado entre hojas y hojas de papel periódico.
Que triste.
Y el momento exacto en el que se dio cuenta de todo, ¿dónde está?. La pieza más importante del puzzle, la pieza final, esta que puede resolverlo todo, se perdió entre la comida.