domingo, 10 de octubre de 2010

"Sé que no tengo que estar aquí pero, ¿A caso debería estar en otro lugar?
Tengo las manos frías, y la derecha aguanta un pequeño Marlboro a punto de apagarse. Maldita lluvia. No te conformas con empaparme de arriba a abajo. El viento me sigue despeinando y hace frío, por suerte, la chupa que me compré las navidades pasadas hace el efecto contrario.
Su casa en frente, todas las preguntas corriendo de una punta a otra de mi cabeza. Tan pequeña pero tan profunda. Tan pocas, pero tan dolorosas.
Enciendo otro cigarro, a ver si esta vez hay más suerte y no se apaga al poco rato. Joder, ni siquiera se enciende el mechero, la madre que le paró.
Me tiemblan las manos, y me agarro al muro que me sujeta. Aún más fuerte, como si lo fuese a partir. No, tampoco soy tan fuerte, de ninguna de las maneras.
Cuanta mierda. Estoy hasta el culo de alcohol y las converses llenas de agua.
Que desastre... y sólo son las doce. Campanadas, uvas... Cenicienta, ratón, zapato... Lo que llega a hacer pasarse con el alcohol. Maldito JB.
Quizás tenga que volver a repetirme la razón por la que estoy aquí.
¿Para joderlo más?
Mejor no.
Me levanto, y a tomar por culo. El mechero sale por los aires, el paquete, guardado en bolsillo de la chupa.
Asta luego amor, me cansé de esperar."
















Javi